Desde que era una niña, siempre le gustó tener dinero. No le importaba como lo obtenía, sólo quería tenerlo. A medida que fue creciendo, se dio cuenta de que podía usar su encanto para estafar a los hombres y quedarse con su dinero. No le importaba si los hombres eran buenos o malos, solía salir con ellos, les hacía creer que estaba enamorada de ellos y luego les robaba todo su dinero. A veces incluso les dejaba sin hogar. Era una estafadora profesional y se sentía muy bien con ello. Hasta que un día, conoció a un hombre que cambió todo. Era un hombre bueno y honesto y ella se enamoró de verdad. No podía estafarlo, así que decidió dejar su vida de estafas y vivir honestamente con el hombre que amaba.Así que la mujer se mudo a otro lugar,y vivio feliz junto con su esposo y su niña.